El sábado fue un día completo de markets navideños. Esta semana os enseñaré los dos a los que acudí y el look que escogí.
Por la mañana fuimos hasta el hotel Market donde en el pasaje lateral hacían el Bohème d'éte (mercado de la creatividad) era la primera vez que se celebraba en Barcelona y estoy convencida que no será la última. Me encanta acudir a estas iniciativas porque descubro nuevos artesanos y personas que crean "handmade" piezas increíbles, por su diseño y su calidad. Si os gusta encontrar piezas únicas os recomiendo la visita a estos mercados que en la época navideña proliferan en nuestras ciudades y son geniales para apoyar el comercio local.
Me encanta el estilo industrial antiguo de los cojines de Sail &Pepper
¿Qué os parecen estas lámparas? Carlos Luna es el encargado de la idea y convierte los sifones tradicionales en lámparas para darle un punto de luz a cualquier rincón de casa. Es un chico majísimo que nos explico con detalle el proceso de elaboración. Me encantaron. La apunto a mi whislist navideña ;)
Las chicas de Badabadoc, encantadoras y muy divertidas. Tenían tantas cosas para mostrar que la parada se les quedaba pequeña. Los corazones de la foto ya cuelgan de mi cómoda.
Le Moulin Joly, delicadas piezas y tocados florales con aires vintage.
Cotzy, dos chicas que destilan vitalidad y sensibilidad y saben reflejarlo en sus piezas. Actualmente tienen una edición limitada de piezas que han traído desde Nueva York.
Compartiendo stand con Cotzy, Cake&Co, pasteles, galletas y dulces para hacerte la boca agua con un packaging muy chulo y navideño.
Después de conocer el mercadillo teníamos una cita en el interior del Hotel Market donde nos habían concertado una visita guiada por sus instalaciones. La primera parada era en el Bar Rosso, la coctelería del hotel donde descubrimos una nueva cerveza, BEERCELONA, no soy muy cervecera pero está estaba muy buena, un sabor suave. No conocía el Hotel Market y estoy convencida que volveré. El Market Hotel recibe su nombre en honor a una de las
piezas arquitectónicas más emblemáticas del crecimiento urbano de
Barcelona- el Mercado de San Antonio, el primer mercado construido fuera
de las murallas de la ciudad. Antiguamente un edificio de viviendas del ensanche de Barcelona con sus principales características, techos altos, vigas de madera y suelos de gres creando mosaicos. Han respetado la fisonomía del inmueble y te da la sensación de estar en un edifico de viviendas, como dato curioso os cuento que en el hotel todavía quedan tres vecinas que se mezclan con los huéspedes. Es una muy buena opción para alojaros en Barcelona, os recomiendo la junior suite y su increíble terraza, dan ganas de quedarse a vivir allí. ¡QUE TERRAZA! Todos los acabados de las habitaciones son de primera calidad, han mantenido una estética antigua combinando piezas vintages y muebles actuales.
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